EN CONTEXTO: UN SUEÑO ALCANZABLE
¿Qué persona, matrimonio o familia no desea tener su casa propia? La idea de tener un patrimonio digno para tener una vida estable es básica en tiempos modernos, en donde se hacen varias gestiones para que las personas puedan acceder a una por diversos métodos.
Sólo este año, la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) otorgará un subsidio de hasta 85 mil 758 pesos este año a los trabajadores en el estado que ganen menos de tres salarios mínimos.
En otras palabras, subió unos 8 mil 700 pesos en comparación con los $77 mil que se otorgaban hasta el año pasado, señaló el presidente del Consejo Consultivo de la Cámara Nacional de Vivienda, Carlos Viñas Heredia.
La realización de la Feria de la Vivienda marcó el arranque del programa de subsidios federales “Vivienda para prosperar”, dirigido a derechohabientes, que serán de hasta 35 UMA’S (85 mil 758 pesos) de la Conavi, para disminuir el rezago habitacional en el Estado.
Cabe destacar que el subsidio de la Conavi aumentó en proporción al incremento de la UMA, y por ello, las personas pueden solicitar hasta poco más de 85 mil pesos, de acuerdo a sus necesidades para adquirir su vivienda.
Por ello, en El Debate de Punto Medio de esta semana, consultamos a expertos en la temática para preguntar cuáles son las vías por las que los ciudadanos pueden adquirir la casa de sus sueños.
LA PRIMERA SOLUCIÓN A ESE PROBLEMA ES QUE EXISTAN MEJORES SUELDOS
Tenemos salarios muy bajos y estimamos que alrededor de 60 mil personas ganan entre uno y 2.6 salarios y que ya tienen derecho a un crédito de Infonavit, pero la única forma de comprar una casa es mediante un subsidio. El problema es que este año solo podremos apoyar a través de Conavi a 4 mil 500 familias de ese sector.
La primera solución a ese problema es que existan mejores sueldos y eso puede suceder a través de la industrialización con empresas de un nivel mayor que ofrezcan mejores salarios a técnicos o especialistas en los diferentes ramos de la producción.
Estamos buscando un programa que ayude a todas estas personas que trabajan por su cuenta. El que no esté a liado al Seguro Social no significa que no tenga los ingresos, ya que puede ser un emprendedor o un mesero que su salario se compone principalmente de propinas.
LA PROPUESTA DEBE ESTAR ENCAMINADA A QUE LAS PERSONAS ALCANCEN UNA ESTABILIDAD LABORAL
La base de cualquier estrategia que busque generar mejores condiciones para que las personas puedan acceder a una vivienda o a créditos hipotecarios debe ser encaminada a alcanzar una estabilidad laboral para las personas.
Partiendo de la estabilidad laboral podemos asegurar que las personas pueden hacer constar ingresos permanentes, lo que les permitiría ser sujetos de créditos.
De allí podríamos pensar en consolidar esquemas de ahorro voluntario, rentas con opción a compra o pensar en políticas dirigidas a aminorar las cargas económicas por infraestructura pública para los desarrollos, que se reflejen sensiblemente en una disminución en los precios comerciales e incluso en mejorar las características de las viviendas.
“CREZCAMOS JUNTOS” APOYA A TRABAJADORES EN BUSCA DE VIVIENDA
El empleo y el ingreso son los temas a impulsar para poder acceder a un crédito.
En esta administración, se han establecido innumerables estrategias para mejorar los ingresos, apoyando a las micro y pequeñas empresas, además de apoyar la creación de nuevos negocios en todos los sectores de la sociedad.
Pero no todos los casos están ligados al ingreso o al empleo.
Envejecemos como población y cada día más adultos mayores requieren de apoyo para adecuar las casas a sus necesidades físicas, o carecen de una para pasar sus últimos años de vida. En estos casos, no es una estrategia, sino una política pública la que debe implementarse.
Por otra parte, están las familias en estado de vulnerabilidad, madres solteras, adultos con alguna discapacidad y aquellas familias en el desempleo, donde estrategias de apoyo para iniciar algún negocio son la salida.
El importante impulso del gobierno yucateco al emprendimiento, de la mano con programas como “Crezcamos Juntos” del Infonavit, permiten que un trabajador independiente pueda solicitar un crédito de vivienda.
Vamos muy bien con el emprendimiento en Yucatán y siguiendo ese camino, cada día serán más las familias que cuenten con una casa propia, comprada con su trabajo.
LOS YUCATECOS TENEMOS VARIOS PROGRAMAS A NUESTRO ALCANCE
SIN DUDA UNO DE LOS TEMAS QUE OCUPAN a un amplio sector poblacional es el de contar con un patrimonio inmobiliario que asegure estabilidad en el desarrollo humano y familiar, que se adapte a las diversas necesidades y capacidades económicas, que si bien en algunos casos se cuenta con prestaciones laborales que permiten adquirir los bienes en condiciones más favorables, también se presentan situaciones en las que, ante la falta de esas prestaciones, la adquisición de vivienda se vislumbra compleja.
En Yucatán, nuestro gobierno ha instrumentado e implementado a través del organismo rector de la vivienda, mejor conocido como Ivey, programas que atienden específicamente al segundo supuesto antes mencionado, en el que las y los yucatecos pueden recurrir a esquemas de financiamiento estatal para allegarse de una vivienda digna.
Actualmente, las y los yucatecos tenemos a nuestro alcance tres tipos de programa que atienden las necesidades de miles de personas que no cuentan con mecanismos de vivienda, entre los que se encuentran “Apoyo a la Vivienda; Vivienda Joven; Vivienda Digna; y, Autoproducción” con opciones muy variadas y que atienden a sectores con riesgo de vulnerabilidad.
LAS EMPRESAS RESPALDAN AL TRABAJADOR
HAY DOS TIPOS DE PERSONAS QUE NO PUEDEN acceder a un crédito, las personas que tienen un empleo formal que cotizan, y las que no cotizan. Las personas que sí lo hacen sólo tienen que esperar a que junten 116 puntos para que puedan acudir a las instalaciones del Infonavit a realizar su trámite de vivienda, y para eso es un período de ocho bimestres para que alcancen los 116 puntos y puedan solicitar un crédito hiportecario.
Para solicitar el crédito influye mucho la edad de la persona, la empresa en la que trabaja, que sea una empresa que haga puntualmente sus aportaciones (a las que se les llama “Empresas de 10”); y el suelo del trabajador para ver su cuenta de vivienda, todo eso se valora para ver la capacidad de crédito para que no termine por perjudicar su vida normal, y que el trabajador pueda subsanar sus demás gastos. Esa es la política del Infonavit.
En Yucatán, tenemos casi el 98% de cumplimiento de las más de 18 mil empresas que hay en el estado, por lo que es muy difícil que las empresas desamparen al trabajador en estos trámites.
Lo único que tienen que hacer los trabajadores es acercarse y conocer su estado de cuenta de vivienda.
Definitivamente contar con una vivienda adecuada, es uno de los aspectos más importantes en la vida de una persona. La vivienda es esencial para cubrir las necesidades básicas, pero no se trata sólo de tener cuatro paredes y un techo. La Vivienda debe ser un sitio para dormir y descansar en el que las personas se sientan protegidas y gocen de privacidad y un espacio personal; en pocas palabras, un lugar donde puedan formar una familia.
Por estas razones el Ayuntamiento de Mérida 2015-2018 decide encarar las problemáticas que presenta la vivienda en el Municipio y establece como estrategia, el Plan Municipal de Vivienda alineado a las Políticas Públicas del Plan Municipal de Desarrollo.
Las acciones del Plan Municipal Vivienda están dirigidas a familias que presentan pobreza patrimonial (no cuentan con un crédito para Vivienda), hacinamiento familiar, áreas de cocina en condiciones de insalubridad o práctica de fecalismo al aire libre; por lo que a través de la construcción de cuartos dormitorio, techos, pisos, cocinas, baños ecológicos y biodigestores. El eje de apoyo a la mujer es transversal en dicho Plan de vivienda y ha sido una prioridad del mismo, por lo que el 66% de los hogares beneficiados tienen como soporte principal a jefas de familia, asimismo, se realizó un Convenio con Hábitat para la Humanidad para la construcción de 350 viviendas completas, de las cuales, 68% fueron para hogares con jefas de familia. En el eje de inclusión social, se destacan 102 personas beneficiadas con algún tipo de discapacidad, cuyas acciones, consideraron adecuaciones especiales para garantizar la accesibilidad a sus construcciones.
Lo anterior responde al tema en la política de Infraestructura Social de la actual Administración Municipal.
Por Martín Arias
Fotos: Cortesía
