José Ignacio Acevedo Martín fue un progreseño trabajador, anotador de juegos deportivos, locutor de radio, amante de la filatelia y de la fotografía
Colaborador de diferentes medios de comunicación en el puerto de Progreso, donde participó cono Rey Feo en varios carnavales, José Ignacio Acevedo Martín es recordado cariñosamente por medio de anécdotas contadas por sus familiares, quienes destacan el enojo que causaba a doña María del Socorro Bobadilla Burgos escuchar que a su esposo le llamaran con el apodo de “Bichusi”, que en realidad era el nombre de un viejo cayuco, propiedad de su padre, y en el que gustaba pasar una buena parte de su tiempo libre.
Así lo explicó su hijo Luis Acevedo Bobadilla, en un artículo escrito por el maestro Pedro Bermúdez Solís, en el que se contó con la colaboración de su sobrino nieto, el también periodista Roberto Palma Madera. En dicho texto se destaca que a su familiar este apodo en ningún momento le molestaba o le incomodaba, “es más… parecía formar parte de su identidad y le gustaba”, escribió.
De acuerdo con el material, don José Ignacio nació el 19 de septiembre de 1915 en Progreso, Yucatán, justamente en el predio que en la actualidad es el Hotel Yaxactún. Falleció a la edad de 92 años, el 26 de septiembre del 2007, pero a la fecha es recordado por su personalidad pintoresca, amena, popular y trabajadora.
Sus padres fueron Ignacio Acevedo y Gertrudis Martín, quien cuando los amigos de su hijo acudían por él para jugar les decía que “Nacho” estaba en el “Bichusi”, refiriéndose al barquito que estaba en la playa. De ahí que pronto la banda de jóvenes de la época identificó a Nacho con el apodo que le acompañaría toda su vida: Bichusi.
Don Ignacio fue un hombre muy trabajador, que a lo largo de su vida realizó un sin fin de actividades, fue almacenista en la aduana del puerto de Veracruz, cajero en la aduana marítima de Progreso, corresponsal de diversos periódicos en el puerto y también anotador oficial de los juegos de los Tiburones de Progreso en el campo de béisbol, así como también de los juegos de sóftbol que se realizaban en la cancha a un costado del Palacio Municipal.
De igual forma, su talento para la precisión lo convirtió en anotador insustituible de los juegos de básquetbol que se efectuaban en la cancha “Cházaro Pérez”, a un costado del Palacio Municipal, y en la cancha del Club de Leones.
Cabe señalar que el maestro Cocolín y Pepe Plátano lo popularizaron con la frase que se repetía cada vez que alguien encestaba una canasta, y gritaban al unísono: ¡Cuenta Bichu! (por la canasta anotada), y después, al paso del tiempo, todo el público asistente al evento deportivo gritaba en coro: ¡Cuenta Bichu!
Sus actividades no solo se constreñían al registro de los juegos deportivos, pues también fue locutor de radio en un programa deportivo de una hora a la semana, el cual se transmitía en las noches en la primera estación de radio que estuvo en Progreso, la XEPY.
Entre sus principales pasatiempos se encontraba la pasión de su vida: La filatelia. Se le considera el más importante filatelista no solo de Progreso sino de todo Yucatán. Su colección de timbres postales era una excelencia recopilación de estampillas y sellos, que dejaban pasmado hasta al más exigente amante de este arte, así lo recuerda el periodista y sobrino nieto de don Ignacio, Edgar Muñoz Acevedo. Según menciona, Bichusi también fue un apasionado de la fotografía, arte en el que con la ayuda de su maestro, el decano de los fotógrafos del Puerto, Pedro Bermúdez Hernández, se fue involucrando de una manera muy profesional.
Muchas de las fotografías tomadas en el Puerto de Progreso en los años 60, 70 y 80 llevan grabado el sello en la parte posterior de “Bichusi”. Como diría su hijo Luis Acevedo Bobadilla: “Marca Registrada”. Siempre era solicitado para bodas, bautizos, inauguraciones de escuelas, coronaciones y fiestas cívicas.
José Ignacio Acevedo Martín tuvo cinco hijos, pero él siempre decía que tenía siete hijos, ya que fueron dos familias que vivían juntas en dos casas, por eso sus hijos ven a sus primos como auténticos hermanos.
Sus hijos fueron: Zeydi Guadalupe (QEPD), José Ignacio, Luis, Blanca Beatriz y Miguel Ángel. Los primos que fueron como hermanos son Mercy y Roberto Palma Bobadilla (Lino).
Por su personalidad tan heterogénea, por sus múltiples facetas como ser humano, por su ética de su trabajo diario, por su esmerada tarea de ser el “Cronista Gráfico del Puerto”, además de filatelista único, fotógrafo y periodista de toda una época, José Ignacio Acevedo Martín, “Bichusi”, es un orgullo porteño.
Texto: Manuel Pool
Fotos: Cortesía
