PERMÍTANOS, amable lector, dejar un momento la política para enfocarnos en la alerta que lanzó ayer la Coalición Mexicana LGBTEI+ Yucatán, que al dar a conocer su Agenda Estatal de Políticas Públicas reveló que hay poco más de 7,500 yucatecos contagiados con sida, pero lo más grave es que el ritmo de infección es de 2.5 personas por día. El colectivo subrayó que no se debe perder tiempo en aplicar medidas con base en estudios como el que presentó ayer, porque esa enfermedad mortal, para la cual no hay cura sino sólo paliativos, no discrimina a nadie, puede atacar a cualquiera pero, como los mismos integrantes de la diversidad sexual acotaron, corre mayor riesgo de contagio quien carece de información para tomar medidas preventivas, o quien sabiendo cómo cuidarse “a la hora de ejercer la sexualidad no tienes a donde ir por un condón”. Como en muchas cuestiones graves de la vida, nadie o casi nadie cree que le puede ocurrir algo sino hasta que le pasa. Y en esto del sida hay una palabra que hace temblar a muchos: abstinencia.
EN 2017 YUCATÁN registró 220 suicidios, una cifra que refleja la seriedad de este problema social. Por fortuna, como declaró el subdirector de Salud Mental, Manuel Ruiz Mendoza, en los primeros meses de 2018 la tendencia es a la baja, lo que de ninguna manera debe dar pie a relajar el trabajo contra ese flagelo. No son muchos los funcionarios y personas en general que quieren abordar el espinoso tema del suicidio, que según Ruiz Mendoza “es un problema de salud que compete a todos, medios de salud, medios de comunicación y toda la sociedad”. El funcionario detalló una serie de acciones que la administración estatal realiza para frenar ese fenómeno que no sólo acaba con vidas, sino que también carcome la tranquilidad social. Son diversas, decíamos, y correctas las acciones contra el mal, pero parece evidente que hace falta intensificarlas y dedicarles más presupuesto, y llevar a más lugares acciones como las pláticas, talleres y cursos que buscan crear conciencia entre los jóvenes sobre los factores que tienen que evitar para apreciar más su vida y lograr la felicidad. La tarea es convencer a todos de que vivir es maravilloso…
Por Gínder Peraza
