Hablar de arte es mas sencillo de lo que parece. Aunque el arte impacta a cada quien de forma diferente te damos una guía para que puedas lograrlo.
1. Observa. Dedica tiempo, tómalo con calma. Frente a una pintura o cualquier obra plástica observa los detalles de la composición y determina tu opinión sobre la misma. Entre más tiempo observas más podrás ser capaz de hablar de la obra, porque irás notando detalle tras detalle. Esto casi puede convertirse en un diálogo: la obra empezará a ser significativa para ti.
2. Identifica el estilo. ¿Es abstracto, realista, expresionista, surrealista o impresionista? Consulta en internet las características generales de estos estilos; son los más comunes. Por ejemplo, puedes identificar una obra realista cuando el artista reproduce una imagen con aspectos casi fotográficos. Por otro lado, el arte abstracto no intenta imitar la realidad, crea sensaciones a partir de líneas y colores.
3. Contextualiza. Averigua sobre la época de la obra. ¿Cómo afectó a la obra la época y su contexto histórico? ¿Qué movimientos se estaban llevando a cabo en ese momento? ¿Qué acontecimientos se ven reflejados en la obra? ¿Por qué fue significativa? Estas preguntas son importantes porque nos ayudan a darle valor al arte.
4. Lee sobre el artista. Al informarte sobre el artista podrás entender mejor lo que ves: sus intereses, inspiraciones y formas de entender el mundo están ahí, en cada pieza, en cada trazo, textura y color. Las galerías siempre brindan información sobre sus artistas, ya sea en un folleto o en una pequeña semblanza junto a la obra.
5. Describe lo que ves. Puedes hablar del material, de la composición, de los colores y texturas; para después hablar del estilo y, finalmente, lo más importante: los sentimientos y sensaciones que evoca en ti. Aprende algunos términos descriptivos comunes de acuerdo a tu percepción: dinámico, íntimo. Sugerente, desafiante…¡lo que nazca dentro de ti!
Texto y foto: Cortesía
