El uso de transgénicos en cultivos para el campo es una opción viable, aunque aplicarlos debe ser bajo una gran responsabilidad, de modo que no afecten otros productos, advirtió el director del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), Felipe Sánchez Téyer.
Entrevistado sobre el tema, el investigador externó que los transgénicos pueden ser herramientas desde el punto de vista científico, al tiempo que manifestó que han estado presentes desde hace varios años, por lo que descartó que sean dañinos.
“Han estado presentes a lo largo de la historia, incluso de forma natural, con la mezcla de genes y genomas. Los cereales son una muestra de ello”, dijo.
Sánchez Téyer señaló que el punto clave es utilizarlos con responsabilidad, de modo que se analice si el cultivo en cuestión no afectaría a otros productos.
“Se tiene que evaluar el riesgo de la mezcla, por ejemplo con el maíz. Al ser Yucatán centro de origen y diversidad, es importante analizar el impacto que pudiera tener”, externó.
Recordó que en el caso de Yucatán, se cerró el cultivo de transgénicos como la soya, al corroborarse que estaba afectando a la miel, aunque afirmó que el producto en sí, no causa daños a la salud humana, pues no hay estudios que así lo avalen.
Insistió en que el uso de los productos genéticamente modificados requiere de un análisis profundo, antes de su siembra, de modo que haya certeza de que no habrá afectaciones a terceros.
Aseveró que los transgénicos forman parte de la vida cotidiana de las personas, pues productos como el algodón y el maíz, son parte de estos, en la actualidad.
–Acom
